DESPERDICIOS: QUIENES MAYORES COSTES SUMAN A NUESTRO PRODUCTO O SERVICIO FINAL

  • Producir en grandes lotes, aun cuando no se ha recibido ningún pedido
  • Cambiar la planificación o peor aún parar un proceso, porque el material no está listo
  • Rehacer documentos, porque no se tenía clara la información
  • Recibir múltiples correos todos los días de información irrelevante o que no es necesario que la sepas, porque nadie ha establecido el verdadero flujo de información

Estos son casos que se nos presentan todos los días en las empresas, tanto de manufactura como de servicios. Y aunque al leerlos es evidente que son acciones perjudiciales, lo que resulta más novedoso es la poca atención que en la mayoría de los casos se presta a estas situaciones. Lo más común es que todos estos desperdicios se convierten en factores aceptables, los justificamos y nos acostumbramos a ellos.

Esto se da principalmente porque optamos por el camino de adición para incrementar nuestra productividad, queremos ser más excelentes, añadir extras a nuestros productos y servicios, somos poco conscientes de que el costo total está lleno de valores que poco o nada de valor añaden a lo que el cliente busca.

Una de las consecuencias de este camino, es la reducción de competitividad que presentamos en el mercado porque sí, todo el costo que se genera para poder entregar el producto o servicio final ¡alguien lo va a pagar!… Casi siempre es el cliente.

Entonces, ¿por qué no tratar de ir por un segundo camino y disminuir todo lo que en el proceso aumenta su costo final (más no su valor hacia el cliente)?

La primera razón clara es: porque no identificamos los factores que pueden ser eliminados.

Y la segunda porque si superficialmente los notamos no invertimos ni tiempo ni recursos en trabajar en ellos, de nuevo, optamos por la adición.

Para que nos sea más fácil esta necesaria identificación vamos a detallar un poco más sobre algunos de los desperdicios que podemos encontrar a lo largo de todo el proceso para la obtención de un producto. Y aunque las consecuencias de los desperdicios sean más evidentes en el área productiva también los podemos encontrar en tareas administrativas. Para optimizar los procesos en el área administrativa podemos aplicar Lean Office, que serán metodologías muy similares al Lean Manufacturing, pero adaptadas a los procesos que podemos encontrar en oficinas o empresas de servicios. También es importante que se analicen los costos generados por desperdicios dados en oficinas, pues al final puede ser algo significativo.

Para conocer más de todas estas actividades que no aportan valor hemos hecho un corto resumen de sus características.

El primer paso siempre será identificarlos, después el eliminarlos o reducirlos es un camino de trabajo constante y en el que herramientas de Lean, como 5S, SMED, VSM, encuentran su propósito y sus beneficios directos y palpables para todos los miembros de la organización.

En Enginy Industrial te guiamos tanto en el análisis inicial como en la selección de las mejores herramientas para cada caso y su correspondiente aplicación y conservación.